Comadritas y Compas, nos pasamos la vida maquinando e ingeniando cómo perder dos miserables libras. Que si me amarro la boca y solo tomo jugos por 5 días, que si pura proteína, que si la dieta de la toronja, o peor todavía: la dieta “aérea”. ¡Puro bocado de aire!!
Pero, ¿se han parado a pensar lo duro que es para nuestras niñas que están a punto de cumplir sus quince?. Ya contrataron salón, fotógrafo, y cada vez que van a probarse el vestido para los últimos arreglos se llevan la terrible noticia de que aumentaron una pulgada de cintura.
Por eso les quiero compartir estos consejos de una mamá muy ingeniosa, Gaby Estrada, quien logró poner en cintura a su hija justo a tiempo para la fantástica quinceañera que celebraron este fin de semana. Con amor y tesón logró que su princesa perdiera 25 libras. Pero lo mejor es que perdió más volumen que peso. ¿Cómo? Con estos 6 pasos:
1. Confiar en ti misma. Gaby nos dice que tenemos que convencer a la quinceañera de que ella puede perder peso si se lo propone. Sin la famosa autoestima y el famoso “sí se puede”, resultará imposible alcanzar las metas.
2. Asegurarse de que tu hija tome la decisión de que verdaderamente quiere perder peso, y no que solo lo diga de piquito para afuera. Hay niñas que prefieren quedarse gorditas y no sufren tanto por su peso como para sacrificarse con dietas y ejercicio.
3. No permitas que solo coma una vez al día. Eso solo hará que coma con más ansias. Debe de acostumbrarse a tres comidas al día y tres snacks. Llénale la mochila de la escuela de zanahorias, uvas, fresas, almendras, etc.
4. No le prohibas comer nada, porque se obsesionará y se lo comerá a escondidas. Mejor dile que puede comer sodas, chips, nieves, pero poquitas. Que reduzca las cantidades a una a la semana.
5. Que tome tres tes de raíz de tejocote al día, sin químicos ni productos peligrosos. El tejocote es diurético y ayudan a expulsar líquido y perder volumen.
6. Y por último: predicar con el ejemplo. Si la niña está viendo la tele: invítala a dar un paseo contigo. Si está en su ama jugando con su teléfono, pídele que ayude a trapear o a sacar la basura. Inscríbanse juntas a una clase de zumba. Pónganse los tenis y vayan al mall a curiosear. El sofá, las novelas y el teléfono engordan más que un pastel de chocolate. Si tu hija te ve activa, se pondrá las pilas. Y cuando de mayor vea sus fotos de la quinceañera te lo agradecerá con miles de besos.
¿A que nuestra Angie quedó bella y en forma? Ahora compartan las fotos de sus quinceañeras y sus consejos para que luzcan preciosas y sanas.
